El mar, el agua, H2O, hidrógeno y oxígeno…
Hace ya algún tiempo, unos 300.000 años después del Big Bang (15.000 millones de años, año arriba, año abajo...como pasa el tiempo), la bola de fuego original ya había conseguido bajar su temperatura de unos 100.000 millones de grados centígrados a unos templados 5.000 grados, entonces los electrones se pusieron a orbitar alrededor de los protones, así porque sí. ¿Y que tenemos si se une un electrón a un protón?…pues de toda la vida un átomo de Hidrógeno. Y así durante eones (tiempo indefinido pero mucho) a base de golpes, uniones y separaciones el universo fue acumulando hidrógeno como para comenzar a agregarse y formar nubes cada vez mayores hasta llegar a colapsarse bajo su propia gravedad.
Dentro de estas nubes algunas zonas colapsaron para formar estrellas, entonces en los núcleos de las galaxias la temperatura volvió a subir hasta acercarse de nuevo a la que había justo después del Big Bang y la presión aumentó.
Durante millones de años las estrellas fueron evolucionando y los átomos de hidrógeno se unían en su interior para formar Helio (2 protones), 3 núcleos de helio se convertían en Carbono y si el carbono acoplaba otro de Helio ya teníamos Oxígeno.
Y así hasta llegar al hierro, pues entonces la fusión se detiene, la gravedad es mayor que la fuerza que emana del calor interno de la estrella y se desploma sobre sí misma, rebota, explota y escampa por doquier gas estelar caliente y todos los productos de su fusión a una velocidad de millones de kilómetros por hora. Toda esta nube se encuentra con las nubes de hidrógeno que todavía quedan por ahí y por primera vez fuera del núcleo de una estrella se encuentran el hidrógeno y el oxígeno.
Bajemos de las nubes y pongamos pies en la tierra. Posiblemente el los libros de texto seguirá explicándose (espero que no) la teoría de que el agua de la tierra proviene del interior de la misma expulsado por la actividad volcánica de las primera etapas terrestres. Bueno, pues en los 4.600 millones de años que tiene nuestro planeta no ha habido tanta actividad volcánica como para conseguir tal hazaña.
Vayamos a algo más serio. Cuando el sistema solar se formó condensándose a partir de una nube de polvo como Orión, la mayor parte se compactó para formar el Sol (unos 100.000 años tardó) y el resto empezó a girar formando un amplio disco plano constituido por granos de roca y hielo. A medida que fueron precipitando empezaron a colisionar y a pegarse, produciendo electricidad estática como para producir relámpagos y truenos, y en unos 10.000 años teníamos ya los primeros asteroides. Seguimos colisionando y empezamos a ver planetas girando alrededor del sol (unos 30). Pero había mucho planeta y poco sitio así que siguieron chocando a velocidades de miles de kilómetros por hora. Esto continuó durante unos 100 millones de años y al final quedaron 4 ganadores en la parte más cercana al sol: Mercurio, Venus, Tierra y Marte.
Así que la Tierra se formó a base de ganar en las peleas y atraer hacía sí a otros planetoides y absorberlos, en estos golpes inmensos e inimaginables la roca se fundía y vaporizaba liberando toda el agua atrapada en las rocas. Tanto vapor habría formado una gruesa capa sobre la Tierra produciendo un aumento de la temperatura, tanto como para vaporizar totalmente el agua. La temperatura subió tanto que al final la tierra se fundió. Toda la tierra era roca líquida. A uno 1260 grados todo esto se equilibró, el vapor que salía era el mismo que entraba.
Poco a poco la lluvia de planetoides cesó y la tierra comenzó a enfriarse, al fin empezó a caer agua en forma líquida, aunque no demasiado refrescante para lo que acostumbramos hoy pues las gotas estarían a unos 315 grados (la presión atmosférica era de unas 100 atmósferas, por eso el agua a 315 grados continuaba líquida). Esta lluvia pudo durar milenios hasta que prácticamente toda el agua de la atmósfera cayó sobre la tierra. Según cálculos el máximo de agua que una atmósfera de vapor puede soportar es aproximadamente el agua que existe en los océanos en la actualidad: 1’4 trillones de toneladas.
El choque tardío de una planetoide del tamaño de Marte, que acabó rebotando hacia el espacio después de dejarnos parte de su material, formó la Luna que conocemos y debido a este choque posiblemente si había alguna atmósfera u océano ya formado se fue al traste.
Así que volvemos a estar sin agua en la tierra…¿entonces de dónde viene tanta agua? Y no vale lo de los angelitos meando porque no hay pruebas concluyentes sobre eso.
Los planetas que más agua presentan entre sus partículas son los gigantes exteriores (Júpiter, Saturno y Urano), estos planetas se formaron a base de partículas heladas debido a la distancia al sol, entonces ¿Por qué la tierra tiene agua si no tiene nada que ver con estos grandes planetas? El punto de unión se encuentra en los cometas. Inmensos contenedores de hielo formados entre Júpiter y Saturno. Un cometa como el Halley contiene cientos de miles de millones de toneladas de agua, sólo unos cuantos de estos cuerpos helados golpeando la tierra la podían haber llenado de agua. Pero no toda el agua de la tierra proviene de los cometas (el agua de estos es químicamente distinta al agua de la tierra, pues contiene el doble de deuterio (isótopo más pesado del agua). Una posibilidad del origen para esta agua más ligera se encuentra en los meteoritos húmedos procedentes del cinturón de asteroides que existe entre Marte y Júpiter, que también pudieron chocar continuamente contra la Tierra.
Y porqué no hay agua en Venus o en Marte?
Lo fácil sería contestar con el principio antrópico, “las cosas son así porque si no fueran así no estaríamos aquí para verlo”, que me libró una vez de una pregunta comprometida en clase de filosofía.
Pero para los lectores del blog sedientos de conocimientos diré rápidamente que Venus está demasiado cerca del sol como para poder mantener el agua en forma líquida, y Marte es demasiado pequeño por lo que absorbió poco calor de las colisiones que lo formaron, así que el vapor se le acabó pronto. La tierra en su interior todavía esta caliente lo que hace funcionar los volcanes, que devuelven el dióxido de carbono a la atmósfera manteniendo nuestra atmósfera en una agradable temperatura. Hasta que llegamos nosotros y vamos a dar al traste con 4.600 millones de años de construcción planetaria.
Leer más...
Hace ya algún tiempo, unos 300.000 años después del Big Bang (15.000 millones de años, año arriba, año abajo...como pasa el tiempo), la bola de fuego original ya había conseguido bajar su temperatura de unos 100.000 millones de grados centígrados a unos templados 5.000 grados, entonces los electrones se pusieron a orbitar alrededor de los protones, así porque sí. ¿Y que tenemos si se une un electrón a un protón?…pues de toda la vida un átomo de Hidrógeno. Y así durante eones (tiempo indefinido pero mucho) a base de golpes, uniones y separaciones el universo fue acumulando hidrógeno como para comenzar a agregarse y formar nubes cada vez mayores hasta llegar a colapsarse bajo su propia gravedad.
Dentro de estas nubes algunas zonas colapsaron para formar estrellas, entonces en los núcleos de las galaxias la temperatura volvió a subir hasta acercarse de nuevo a la que había justo después del Big Bang y la presión aumentó.
Durante millones de años las estrellas fueron evolucionando y los átomos de hidrógeno se unían en su interior para formar Helio (2 protones), 3 núcleos de helio se convertían en Carbono y si el carbono acoplaba otro de Helio ya teníamos Oxígeno.
Y así hasta llegar al hierro, pues entonces la fusión se detiene, la gravedad es mayor que la fuerza que emana del calor interno de la estrella y se desploma sobre sí misma, rebota, explota y escampa por doquier gas estelar caliente y todos los productos de su fusión a una velocidad de millones de kilómetros por hora. Toda esta nube se encuentra con las nubes de hidrógeno que todavía quedan por ahí y por primera vez fuera del núcleo de una estrella se encuentran el hidrógeno y el oxígeno.
Bajemos de las nubes y pongamos pies en la tierra. Posiblemente el los libros de texto seguirá explicándose (espero que no) la teoría de que el agua de la tierra proviene del interior de la misma expulsado por la actividad volcánica de las primera etapas terrestres. Bueno, pues en los 4.600 millones de años que tiene nuestro planeta no ha habido tanta actividad volcánica como para conseguir tal hazaña.
Vayamos a algo más serio. Cuando el sistema solar se formó condensándose a partir de una nube de polvo como Orión, la mayor parte se compactó para formar el Sol (unos 100.000 años tardó) y el resto empezó a girar formando un amplio disco plano constituido por granos de roca y hielo. A medida que fueron precipitando empezaron a colisionar y a pegarse, produciendo electricidad estática como para producir relámpagos y truenos, y en unos 10.000 años teníamos ya los primeros asteroides. Seguimos colisionando y empezamos a ver planetas girando alrededor del sol (unos 30). Pero había mucho planeta y poco sitio así que siguieron chocando a velocidades de miles de kilómetros por hora. Esto continuó durante unos 100 millones de años y al final quedaron 4 ganadores en la parte más cercana al sol: Mercurio, Venus, Tierra y Marte.
Así que la Tierra se formó a base de ganar en las peleas y atraer hacía sí a otros planetoides y absorberlos, en estos golpes inmensos e inimaginables la roca se fundía y vaporizaba liberando toda el agua atrapada en las rocas. Tanto vapor habría formado una gruesa capa sobre la Tierra produciendo un aumento de la temperatura, tanto como para vaporizar totalmente el agua. La temperatura subió tanto que al final la tierra se fundió. Toda la tierra era roca líquida. A uno 1260 grados todo esto se equilibró, el vapor que salía era el mismo que entraba.
Poco a poco la lluvia de planetoides cesó y la tierra comenzó a enfriarse, al fin empezó a caer agua en forma líquida, aunque no demasiado refrescante para lo que acostumbramos hoy pues las gotas estarían a unos 315 grados (la presión atmosférica era de unas 100 atmósferas, por eso el agua a 315 grados continuaba líquida). Esta lluvia pudo durar milenios hasta que prácticamente toda el agua de la atmósfera cayó sobre la tierra. Según cálculos el máximo de agua que una atmósfera de vapor puede soportar es aproximadamente el agua que existe en los océanos en la actualidad: 1’4 trillones de toneladas.
El choque tardío de una planetoide del tamaño de Marte, que acabó rebotando hacia el espacio después de dejarnos parte de su material, formó la Luna que conocemos y debido a este choque posiblemente si había alguna atmósfera u océano ya formado se fue al traste.
Así que volvemos a estar sin agua en la tierra…¿entonces de dónde viene tanta agua? Y no vale lo de los angelitos meando porque no hay pruebas concluyentes sobre eso.
Los planetas que más agua presentan entre sus partículas son los gigantes exteriores (Júpiter, Saturno y Urano), estos planetas se formaron a base de partículas heladas debido a la distancia al sol, entonces ¿Por qué la tierra tiene agua si no tiene nada que ver con estos grandes planetas? El punto de unión se encuentra en los cometas. Inmensos contenedores de hielo formados entre Júpiter y Saturno. Un cometa como el Halley contiene cientos de miles de millones de toneladas de agua, sólo unos cuantos de estos cuerpos helados golpeando la tierra la podían haber llenado de agua. Pero no toda el agua de la tierra proviene de los cometas (el agua de estos es químicamente distinta al agua de la tierra, pues contiene el doble de deuterio (isótopo más pesado del agua). Una posibilidad del origen para esta agua más ligera se encuentra en los meteoritos húmedos procedentes del cinturón de asteroides que existe entre Marte y Júpiter, que también pudieron chocar continuamente contra la Tierra.
Y porqué no hay agua en Venus o en Marte?
Lo fácil sería contestar con el principio antrópico, “las cosas son así porque si no fueran así no estaríamos aquí para verlo”, que me libró una vez de una pregunta comprometida en clase de filosofía.
Pero para los lectores del blog sedientos de conocimientos diré rápidamente que Venus está demasiado cerca del sol como para poder mantener el agua en forma líquida, y Marte es demasiado pequeño por lo que absorbió poco calor de las colisiones que lo formaron, así que el vapor se le acabó pronto. La tierra en su interior todavía esta caliente lo que hace funcionar los volcanes, que devuelven el dióxido de carbono a la atmósfera manteniendo nuestra atmósfera en una agradable temperatura. Hasta que llegamos nosotros y vamos a dar al traste con 4.600 millones de años de construcción planetaria.